Último reducto de naturaleza viva que nos queda en El Coronil. ¡ Conócelo y Cuídalo !



domingo, 16 de diciembre de 2012

BOTÓN DE ORO

 
Ranunculus bullatus
 



Tapizando algunas de las zonas más húmedas nos encontramos con el botón de oro. Su nombre genérico Ranunculus hace referencia al de “rana”, y “colo” habitar por su condición de vivir en lugares más húmedos. El específico “bullatus” se refiere a la forma de botón que tiene elmismo.




            Los animales no las comen por tener un sabor acre, además los contenidos en alcaloides que contiene son irritantes y pueden llegar a causarles la muerte.
Frutos



            Estas plantas, de floración tardía hizo pensar que tuviera propiedades que favorecieran  la fertilidad en personas ya de edad más avanzada. Así en el siglo XVI el botánico que la describió decía: “si de ella emplea una vieja, se hace apta para recibir el semen”.
Detalle floral con los numerosos estambres


viernes, 7 de diciembre de 2012

MANDRÁGORA, magia y misterio

Mandragora autumnalis

Esta curiosa planta de grandes hojas verdes y flores blanco-violáceas, está rodeada de misterio y leyenda.     
No es aquí una planta abundante pero sí  la podremos encontrar en los meses de noviembre y diciembre con cierta frecuencia, sobre todo en la cara norte.

Pertenece a la familia de las solanáceas, a la que también pertenecen otras muy conocidas de nuestras huertas como son los tomates y pimientos. Aunque estas nos la comemos en buenos picadillos, sin embargo la mandrágora cuyos frutos son como pequeños tomatillos, resulta ser muy tóxica por su alto contenido en alcaloides (atropina).
        Es conocida desde la antigüedad utilizada para fines curativos y en los rituales mágicos de las brujas. Las alucinaciones y los “viajes” que éstas realizaban a lomos de sus escobas, se lo debían a esta planta.
       Su raíz posee unas ramificaciones que los antiguos quisieron ver en ella una figura humana. A menudo se bifurca en dos,  que se correspondería con las piernas de una persona, lo que le da cierta forma antropomórfica.

La leyenda cuenta que al ser arrancada, ésta emitía unos gritos que llegaban a enloquecer a la persona que lo hacía. Por ello existen dibujos y escritos antiguos con la forma de proceder para arrancar una mandrágora sin sufrir daño: amarrar un perro hambriento a la planta y poner un trozo de carne cerca para que éste tire  para alcanzarlo y acabe sacándola. De este modo el que enloquecería sería el perro y el dueño podría recoger la planta.

Además se cuenta también que aquel que poseyera una mandrágora, sus raíces se transformarían en hombrecillos que protegerían a su dueño.
Primer plano de una flor
 
También fue utilizada con fines medicinales, como analgésico y,  en tiempos de Plinio como anestésico. Como analgésico en dolores de reuma, para producir el sueño y sus hojas machacadas, como emplaste para las úlceras…

A esta planta han hecho referencia autores desde Maquiavelo a J.K.Rowling en su novela de Harry Potter.